De la entrada de este joven bloguero (y su primo) en el mundo de los negocios internacionales y del inevitable éxito que esto conllevará

"¿Qué pasaría si esto fuera verdad?"
"¿Qué pasaría si avanzo?"
"¿Cómo sería mi futuro?"
"¿Qué pasaría con mi futuro si no avanzo con esto?"

Era una tarde normal de verano. Me encontraba hueveando con mi primo Elmo, que se está quedando en mi casa (arrochando), cuando surgió el tema de mi situación económica, puesto que planeo remplazar mi recientemente fenecido Xbox 360. En resumen, mi situación era mala.

Pero no pasó mucho para que buscara en sus bolsillos, y me diera la siguiente tarjeta, que procedí a examinar cuidadosamente.

La primera pieza del rompecabezas.

"Ingresos", "aumente", "S/. 3,000", etc. Parecía demasiado bueno para ser verdad. Sin embargo, la tarjeta era real, puesto que los dos la veíamos y podíamos tocar. Entonces, tras unos breves segundos de soñar despierto/salivar pensando en lo que iba a hacer con el dinero (ir a ver a Bob Dylan), cogí su laptop y entré a www.ExitoMundial.com.

Lo que aconteció después duró algunas horas, o fueron tan sólo minutos. Es verdaderamente imposible determinarlo con total certeza, pero lo que es seguro es que me registré con mi nombre de bautizo (Martin Gaylord), y al terminar la presentación, me encontraba solo, y ya había oscurecido. En resumen, nos había sido expuesto cómo funciona la economía y el mercado global, el papel que jugaron los baby boomers, por qué es que alguien no es rico (porque no lo quiere en serio) y lo que es un ur-gurú. Todo esto, de la mano de Tim Sales (respect).

Tim Sales.

Recién a la noche siguiente, la identidad de la empresa con la que estaremos involucrados directamente nos fue revelada: Herbalife.

La Verdad.

Sí, este joven bloguero (y su primo), entrará(n) al mundo de los negocios vendiendo dichos productos, ayudando gente a bajar de peso de día, y manteniendo nuestros trabajos nocturnos (de superhéroes).

Sí, Bob, en menos de un mes planeo contar con tanto dinero que podré viajar en primera clase de último minuto, y comprar una entrada VIP de reventa en la puerta del legendario estadio de Velez.

Marcelo Menacho, ¡ahí vamos!.